Las historias de terror son tan antiguas como la humanidad. Monstruos, fantasmas, lugares embrujados, posesiones demoníacas y muchas otras situaciones que causaban angustia y temor nos acompañan generación tras generación; historias a menudo transmitidas de forma oral. En el año 77, por ejemplo, Plinio el viejo publicó el primero de los volúmenes de su Naturalis Historia, obra de siete tomos que buscaba reflejar el conocimiento sobre la naturaleza hasta la fecha. En uno de sus tomos, Plinio detallaba los monstruosos seres que poblaban tierras de ultramar; relatos escuchados a marineros o quizás en sus propios viajes como comandante naval. De esta forma, Plinio describió seres increíbles como hombres con dos cabezas, lobos con cuerpo humano, cíclopes o seres sin cabeza con ojos y boca en el pecho.
El terror llegó a la literatura para establecerse como un género durante la modernidad. Se considera que la obra Frankenstein o el moderno Prometeo de Mary Shelley dio inicio al género, aunque en sí las historias de terror siempre estuvieron presentes en la literatura. Posteriormente, otros autores como H. P. Lovecraft o Edgar Allan Poe perfeccionaron el género, siendo este último uno de los que innovó con un terror que no solo se apoyaba en seres monstruosos, sino en situaciones que de por si eran terroríficas. Su narración El barril de amontillado es un ejemplo de ello. En la actualidad, el género de terror sigue vigente con nombres como Thomas Harris, autor de novelas como “El silencio de los inocentes” o el conocidísimo Stephen King, cuyas obras ‒al igual que las de Harris‒ se han adaptado exitosamente al cine, causando que las nuevas generaciones se interesen por la lectura de los textos escritos que dieron origen a los filmes.
La literatura de terror también tiene sus cultores en América Latina, Pablo Concha es uno de ellos. El autor, originario de Cali (Colombia), tiene publicado el libro titulado Otra Luz (El Bando Creativo, 2017), donde a través de algunos de sus seis cuentos nos sumerge en la literatura de terror. Boca ‘e Loba tuvo el honor de entrevistar a Pablo Concha, conversación que el lector podrá leer a continuación. Además, el autor tuvo la amabilidad de compartirnos dos de los cuentos que componen su libro, Noche en el cementerio y Otra Luz, que podrán leer en nuestro blog.
Boca e Loba (BL): ¿Cómo nació el interés por las historias y los libros?
Pablo Concha (PC): Por medio del cine. De niño solía ver películas de terror con mi abuela y mi madre y recuerdo que mi mamá solía decirme que aunque las películas eran buenas, los libros en que estaban basadas eran mucho mejores. Fue algo que quedó resonando dentro de mi cabeza. Un día me puse a explorar la biblioteca de mi abuela, distinguí un nombre que recordaba de muchos de los créditos de las películas que veíamos, así que saqué el libro y decidí leerlo. Era Los Ojos del Dragón de Stephen King. Ese fue el comienzo de todo.
BL: ¿Qué autores han influido en su escritura?
PC: Muchísimos. Al principio, cuando mi adicción por la literatura estaba despertando, empecé con Agatha Christie, Ray Bradbury, Stephen King, Clive Barker, H. P. Lovecraft. Luego fui evolucionando a William Gibson, Peter Straub, Elmore Leonard, J. G. Ballard. Ya en la veintena vinieron Roberto Bolaño, Rodrigo Fresán, David Foster Wallace, George Saunders, Lorrie Moore, Kate Atkinson. Últimamente me interesa mucho lo que están haciendo Brian Evenson, Paul Tremblay, Mariana Enríquez y Mónica Ojeda. Y podría continuar hasta aburrirlos…
BL: ¿Cuáles son sus fuentes de inspiración al escribir?
PC: La mayor inspiración proviene de los libros y autores que leo, del cine y de algunos episodios de series de Tv. que sigo. La "inspiración" muchas veces resulta de dos imágenes al parecer inconexas que se juntan sin tener muy claro el por qué. El trabajo realmente duro es darles luego alguna coherencia que pueda traducirse en una narración.
BL: Su libro Otra Luz (El Bando Creativo, 2017) presenta seis historias de terror y misterio. ¿Cuánto tiempo demoró en escribirlas?
PC: La mayoría de los cuentos fueron concebidos, trabajados, revisados y reescritos en el Taller de Literatura Écheme el Cuento de Cali entre los años 2013 a 2015. Estuvieron en hibernación alrededor de un año y luego hubo otra reescritura antes de presentar el proyecto a la convocatoria de Estímulos Cali 2017.
BL: ¿Cuál es el mayor reto a la hora de escribir una historia de miedo o terror?
PC: La capacidad de sorprender. Horadar esa barrera de tedio que muchos lectores tienen. Verás, los lectores muchas veces podemos ser odiosos, y es porque creemos que ya nos sabemos todas las tramas e historias. Romper esa convicción, borrarle al lector esa expresión de superioridad de la cara con un cuento que trate algo distinto o donde pase algo que no se esperaba, es el mayor reto y satisfacción.
BL: En la actualidad, el género de terror se asocia más con el cine, a la imagen y el sonido que generan un susto fácil en el espectador. ¿Hay aún lugar para la literatura de terror?
PC: Claro que sí. Aunque el cine es un medio más popular y de fácil acceso, el impacto que tiene ‒específicamente en el campo del terror‒ no siempre es tan fuerte y la mayoría de las veces es olvidable. La literatura de este género logra ‒cuando está bien hecha‒ remover esa zona íntima del lector donde se aloja el miedo, despertarlo y perdurar en la memoria. La literatura de terror produce imágenes o "sustos" que pueden durar toda una vida.
BL: ¿Está trabajando en algún nuevo texto actualmente? ¿Puede contarnos un poco de la trama?
PC: Estoy en el proceso de revisión de los relatos de un nuevo libro de cuentos.
BL: ¿Libro digital o libro impreso?, ¿Cuál prefiere y por qué?
PC: Libro impreso siempre. Cero libros digitales. Prefiero los libros de verdad. Cogerlos, sentirlos, olerlos, subrayarlos. En esta época actual todos estamos siempre conectados a diversos dispositivos electrónicos y redes sociales y no quiero tener que utilizar un dispositivo más para leer. Prefiero la desconexión total ‒metafórica y literalmente hablando‒ cuando voy a leer.
BL: Recomiéndenos dos obras que sí o sí deberíamos leer.
PC: ¿Solo dos? Los Detectives Salvajes de Roberto Bolaño y El Fondo del cielo de Rodrigo Fresán. Ambas obras son un ejemplo de la vitalidad y originalidad de la literatura latinoamericana contemporánea. Bolaño y Fresán quizá sean los escritores más importantes en lengua española en la actualidad (poco importa el hecho de que Bolaño lleve dieciséis años muerto).
BL: ¿Qué le recomendaría a quienes están empezando a escribir y quieren publicar algún día?
PC: Les recomendaría leer mucho. Leer muchísimo cada día. Reescribir y reescribir. No tener miedo del rechazo. Y tal vez lo más difícil: tener confianza en uno mismo.
BL: ¿Dónde puede conseguirse su libro Otra Luz?
PC: En Colombia puede encontrarse en la Librería Nacional en todo el país. En Cali pueden encontrarlo también en La Casa de la Lectura (en el oeste) y en Expresión Viva. Hay una librería virtual con sede en Instagram donde también puede comprarse: @happybookscolombia
BL: Si algún lector quisiera ponerse en contacto con usted, ¿cómo puede buscarlo?
PC: Aparezco en Twitter e Instagram como @scarypablo